Mirando al futuro: ¿Dónde estarán los talleres de alto rendimiento en 2038?
Este artículo fue publicado originalmente en AftermarketNews.com
2038 parece estar aún muy lejos, pero llegará antes de que nos demos cuenta. La tecnología evoluciona rápidamente y es interesante ver cómo los avances ya están afectando a la industria del automóvil. Es difícil predecir lo que ocurrirá en 20 años.
En el caso de los talleres de alto rendimiento, sin embargo, hay sin duda algunas predicciones que se pueden hacer basándonos en las tendencias actuales de la industria.
Los clientes seguirán queriendo destacar
¿Una cosa que sin duda no cambiará? El deseo de los clientes de tener un vehículo único repleto de las últimas mejoras. Las opciones de mejora de rendimiento del futuro pueden diferir de lo que es popular hoy en día, pero siempre habrá alguien que quiera hacer su vehículo mejor, más rápido, más potente, más personalizado, etc. Además, las aficiones relacionadas con el mundo del motor como el off-roading, el drifting, el rock-crawling y el drag racing no se van a ir a ninguna parte. Los talleres de alto rendimiento que atiendan a los aficionados siempre tendrán un lugar en el mercado.
Así pues, ¿qué va a cambiar?
La realidad aumentada ayudará a los clientes a tomar decisiones
Para asegurar que las modificaciones de rendimiento sean exactamente las que el cliente quiere, los talleres de alto rendimiento pueden invertir en tecnología de realidad aumentada. Esto ayudará a los clientes a ver exactamente el aspecto que tendrán las mejoras en su vehículo.
Si un cliente está indeciso sobre las modificaciones que quiere realizar, la realidad aumentada puede ayudarle a tomar decisiones más rápidas y más informadas.
Más variedad en los sistemas de propulsión
Los talleres de alto rendimiento del futuro tendrán la oportunidad de trabajar con una mezcla de sistemas de propulsión o de especializarse en un tipo específico.
No es ningún secreto que los vehículos eléctricos, los vehículos híbridos enchufables e incluso los vehículos con células de combustible están ganando terreno en el mercado y es probable que sigan haciéndolo. Los avances de rendimiento han hecho que los vehículos no propulsados con gasolina sean bastante atractivos para los tuneadores, lo cual puede conducir a un futuro donde los motores de gasolina sean intercambiados por conjuntos de baterías, motores eléctricos o células de combustible.
Por supuesto, siempre habrá gente de la “vieja escuela” que prefiera seguir mejorando y/o modificando su vehículo de propulsión diesel o gasolina.
Conclusión
La “necesidad de velocidad” está aquí para quedarse y, siempre y cuando estén dispuestos a adaptarse, también lo están los talleres de alto rendimiento.